martes, 29 de marzo de 2011

NIMO, CHUBUT, LA ZORRA Y LAS UVAS.

 Pero yo en esta milonga les detallo
 las bombeadas que en cien años padecimos:
 La más grande fue el penal que no dió Nimo          
 cuando todos vieron la mano de Gallo.
Milonga del Sufrimiento – Ignacio Copani

Corre agónico 1968. Ayer nomás se estrenó un verano que se promete ardiente, a tal punto que su calor se extendería hasta fines de mayo. Hoy el porteñísimo barrio de Boedo recibe una fauna  foránea sin engalanarse de azulgrana, típico atuendo de fiesta dominguera. River y Vélez miden sus aspiraciones en el “Wembley Porteño” en la segunda fecha del triangular convocado para definir el Campeonato Nacional de Football.

Para el sufrimiento de las parcialidades opuestas, los contendientes empataban en 1 el mítico evento, cuando llegó el momento del bochorno, de la ignominia mayor en la historia del balompié vernáculo. Ante a un ya vencido guardametas, un furibundo cabezazo del zaguero millonario Jorge Recio, impulsó el útil  hacia el ineludible destino de anidar en la red adversaria. Es entonces cuando el lateral derecho fortinero, Luis Gregorio Gallo, en ágil pirueta, extiende su mano izquierda y, de modo ilícito, impide la segunda caída de su valla.



¡PENAL!!! Se escuchó bramar desde los cuatro puntos cardinales del Gasómetro… ¡PENAL!!! Gritaron al unísono los relatores, y ¡PENAL!!! Replicaron cientos de miles de receptores de radio a lo largo y ancho del país. Sólo una persona no consideró sancionar la acción con la pena máxima. Esa persona era el árbitro Guillermo Nimo, quien permite que José Marín tome el balón y todo transcurra sin mayores incidencias hasta el pitazo final. River cumple 10 años sin lauros y Vélez se encamina a obtener, una semana más tarde frente a Racing, su primer campeonato en la primera división del futbol argentino.

La afrenta al deporte todo fue borrada de los medios de prensa deportivos, apenas algún pataleo en “La Oral Deportiva”,  o un comentario perdido de Dante Panzeri. “El Gráfico” terminó con la disputa una semana después y el existismo futbolero archivó el expediente del escándalo.



El onganiato sonrió con beneplácito, ni la sucia banda roja por sus reminiscencias bolcheviques, ni el equipo de la simpatía del Tirano Prófugo. Hay quienes se atreven a afirmar que el descontento popular ante la injusticia, generaron el caldo de cultivo ideal para los acontecimientos que encendieron Córdoba 5 meses después, y que hirieron de muerte al gobierno de La Morsa.





La alternativa para ganar al Kirchnerismo 
¿es el fraude?


“Siempre es mejor ganar 1 a 0
con un gol hecho con la mano, que perder.”
Eduardo Van Der Kooy – Código Político - TN

Tuvieron que pasar largos 43 años, 2 meses y 26 días para encontrarnos con una historia parangonable: las elecciones provinciales de Chubut.

A pesar de la exigua diferencia que denunciaba el escrutinio provisorio, y como respuesta a las dudas que asomaban por el manejo de los datos, Mario Das Neves corrió del palco a Buzzi (su candidato a Gobernador) y proclamó la “irrefutable victoria” de “Modelo Chubut”. Los nerviosos representantes del Peornismo Federal que se apersonaron para acompañarlo, respiraron aliviados por no haber repetido el ominoso papelón al que fueron sometidos, 7 días antes, Sanz y Cobos en Catamarca.

Das Neves, El Colorado De Narvaez, "Mano de Piedra" Camaño y Felipe Solá
el domingo, anunciando el Triunfo de "Modelo Chubut". ¿y Buzzi?

Desde Entre Ríos Jorge Busti se apuraba a sumarse al carro triunfal, y comunicaba que lo sucedido en Chubut era una muestra clara que el peornismo federal era la alternativa capaz de derrotar al kirchnerismo. 

Mientras tanto, Eliceche, candidato a gobernador del Frente para la Victoria, empezaba a denunciar irreguaridades que, más tarde fueron dando lugar a la presunción de fraude electoral. A la luz de los hechos de esta semana, no llaman tanto la atención los errores del escrutinio provisorio del domingo 20 de marzo, sino que, sistemáticamente, siempre, los errores beneficiaban a Buzzi y a los restantes candidatos de Das Neves. Como en el ’68, Das Neves, pretende ocupar el lugar de Guillermo Nimo, se niega a ver la mano en el área. 

Como en el ’68, también los medios de prensa nacionales terciaron en la disputa. Si bien el escándalo vende, habido que sea campeón, mejor es preservar el negocio del Fútbol a seguir rascando los pormenores. En la página Web de Clarín se instaló rápidamente (1:07 del 21/3) un gráfico consignando el triunfo del dasnevismo , bajo el que se informaba que eran datos oficiales, de 1118 mesas escrutadas sobre 1133, emitidos por el Superior Tribunal de Justicia de Chubut. Mentira, sólo se trataba del escrutinio provisorio y el Tribunal aludido ni siquiera intervenía en el escrutinio. 

Un título del 21 a las 13 hs., en su edición digital, lo dice todo Chubut: el kirchnerismo impugna el triunfo del Peronismo Federal y denuncia fraude”. El metamensaje es claro: Ya todo terminó, nosotros ganamos, ellos son malos perdedores.

Las plumas mayores del Diario también aportaron lo suyo, hasta se detectó la sorna con que trataban el asunto “secundario” de la denuncia de irregularidades, que poco a poco, en otros medios, fue transformándose en una certeza de fraude. Vean como se seguían los acontecimientos en “El Diario” de Puerto Madryn (acáacá,  y acá), mientras Das Neves se paseaba por TN y otros medios de alcance Nacional, diciendo que denunciaría penalmente a los que denunciaban el fraude, a los directivos de Canal 7 por haber le prestado cámaras, no así a los finaditos chubutenses que se les ocurrió ir a votar, ni a los porteros de los cementerios que los dejaron salir.

Pasaron ya 9 días del inocultable mamarracho, sigue el recuento oficial, se han conocido muchos “errores” que siempre benefician al dasnevismo, se han anulado mesas, y encima, ahora Eliceche, el candidato a gobernador del FPV, aventaja a Buzzi del peornismo federal por casi 2000 votos.

Evidentemente se nota la primer diferencia entre los dos sucesos. A Das Neves no le alcanzó con dar el domingo el pitazo final. Al grupo Clarín no le resultó tan fácil como a “El Gráfico” sepultar el debate y alzarle la mano a su amigo. River tuvo con conformarse con el subcampeonato del ’68, todo indica que el 10 de diciembre Eliceche se sentaría en el sillón de gobernador de Chubut. Nimo siguió una payasesca carrera televisiva. Das Neves hace sus primeros palotes en tal sentido.

K 2 – la Oposición Deshilachada 0
Ya sé que, como sucedió después de Catamarca, ni bien estén los resultados puestos, me van a decir que las elecciones de Chubut son numéricamente insignificantes en relación al padrón nacional y que dos triunfos ajustados no demuestran nada. Pero no se olviden que si estas dos fueron las primeras del año, fue porque la jugada formó parte de un entramado que pretendía instalar que el proyecto K no era invencible, poniendo en juego dos distritos en los que ambos partidos de la oposición se suponía ganarían por  20 o 30 puntos de diferencia.


Bien lo dijo Esopo:



O por lo menos... 
así lo veo yo.



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