martes, 30 de agosto de 2011

¿Boleta única? ¡DE ACÁ!

Dejando de lado consideraciones tales como preguntarme que grado de seriedad puede merecer en la consideración pública la candidatura presidencial de alguien que ni siquiera puede convocar la cantidad de Fiscales necesarios para controlar un acto comicial o repartir sus boletas y propuestas, aquí me pongo a teclear para analizar este asunto del tan mentado ProBolUdO (Proyecto Boleta Unica del Oportunismo).


Cualquier lector mas o menos habitual de esta Columna, podrá suponer, nada más que con la lectura del título, que la conclusión final será algo como “con la boleta única, hagan un rollito y métansela etc.”, pero no, trataremos de complejizar la obviedad y esgrimir algunos fundamentos sobre la oportunidad, los defectos y la intencionalidad del proyecto en danza, porque a sus autores uno ya les tiene picado el boleto.

Arrancamos mal, no es ÚNICA la boleta única. 

Acá podemos apreciar el proyecto de Reforma del Código Nacional Electoral que presentó Gil Lavedra, a consideración de sus pares, promediando mayo de este año. 

Prestemos atención a los que dice el art. 2º del proyecto: 

“Sustitúyese el artículo 62 de la ley 19.945 (Código Nacional Electoral), el que quedará redactado de la siguiente manera: 
“Boleta Única. La boleta única debe integrarse con las siguientes características en su diseño y contenido: 
a) Se debe confeccionar una boleta única para cada categoría de cargo electivo. Cuando exista votación simultánea, la boleta única por categoría debe identificarse por color, procurando que no coincida con el símbolo o figura utilizado por ningún partido. 
b) Para la elección de presidente y vicepresidente, la boleta única debe contener los nombres de los candidatos y sus respectivas fotos. 
c) Para la elección de diputados nacionales se deben incluir el nombre del primer candidato. 
d) Para la elección de senadores nacionales se deben incluir los nombres de los dos candidatos.” 

Y en este humilde y sencillo acto, comienzo a expresar mi discrepancia:

1) El diputado Gil escoge, para nada al azar, el sistema de boleta única más acorde a las acotadas posibilidades de su candidato presidencial. Corría el mes de mayo y cualquier encuestadora preveía una intención de voto para Cristina superior al 40%, y lejos, muy lejos del segundo. Posiblemente ya entonces en las locas cabecitas radicales anidaba la resignación y se prefiguraba la necesidad de despegar a los candidatos a legisladores de la suerte ya signada a los postulantes al Sillón de Nestor. El “efecto arrastre” podría ser demoledor y había que acotarlo.

Ese debió ser el oportunista motivo que llevó a los legisladores radicales a escoger el modelo santafesino en vez del cordobés donde realmente existe una boleta única (acá está la ley electoral cordobesa aprobada un mes antes que Gil Lavedra presentara su proyecto, vean especialmente el art. 53º).

Modelo de B.U. única cordobesa. Alineadas horizontalmente se
distinguen claramente las pertenencias partidarias, encabezadas
por su símbolo a la izquierda. Las columnas identifican los cargos.

Insisto, la elección del modelo santafesino, en lugar del cordobés, no es neutra ni inocente. En la boleta única el modelo cordobés se percibe con toda claridad la pertenencia partidaria de cada categoría de candidatos, ubicándose en una misma línea los postulantes afines políticamente. Con un solo vistazo a la boleta ya puedo percatarme que mi candidato preferido (sea a intendente, gobernador o legislador) “me sugiere” cuales candidatos de las otras categorías son sus aliados o comparten la misma pertenencia. Yo podré o no dar bola a tal sugerencia, pero no me pasará desapercibida. 

El modelo santafesino (acá esta la ley, ver el art. 2º), en cambio, propone tantas boletas como categorías de cargos se elija. Así se desdibujan las relaciones de afinidad y pertenencia partidaria.


B.U. santafesina para gobernador. Habrá otra totalmente 
distinta para Dip.Prov., otra para Sen.Prov., otra para Int. y
otra para Concejales, sin que quede clara la afinidad de c/uno.

Me pregunto ¿acaso el Proyecto Gil Lavedra (como el santafesino) no atenta contra el rol que la Constitución Nacional le asigna a los partidos políticos desde 1994 (Art. 38.- Los partidos políticos son instituciones fundamentales del sistema democrático. Su creación y el ejercicio de sus actividades son libres dentro del respeto a esta Constitución, la que garantiza su organización y funcionamiento democráticos, la representación de las minorías, la competencia para la postulación de candidatos a cargos públicos electivos, el acceso a la información pública y la difusión de sus ideas.)? ¿No representan una rémora del neoliberalismo farandulero noventista, época en la cual los “figurones” desplazaban las orgánicas y los partidos renegaban de sus idearios en pos de acogerse al discurso único dictado por los sentimientos del Mercado? ¿Qué sentido tiene la atomización de las propuestas legislativas y ejecutivas si, al menos teóricamente, Diputados, Senadores y Presidente de un mismo partido llevan adelante un mismo proyecto? ¿Por qué pretender ocultar con el formato de una boleta que Cristina (o cualquier otro presidenciable) se sentiría más acompañada con tal o cuales candidatos que con otros? Y no me vengan con el verso republicanero de una amañada interpretación del significado de la división de poderes porque se van a exponer a la más descarnada ridiculización…

En síntesis, además de decir que el proyecto en danza es OPORTUNISTA, también me doy el gusto de sostener que es MENTIROSO, porque mentir no es sólo contradecir la verdad, sino también ocultarla.

2) Y ya que estamos con los epítetos a la orden del día, denuncio que el proyecto de Gil Lavedra es MENOS TRANSPARENTE para el elector que el sistema de la “lista sábana”. En las categorías colegiadas (legislativas) en la lista sábana figuran la totalidad de los candidatos titulares y suplentes. Al sistema se lo critica porque tras de dos o tres “primeras figuras” normalmente conocidas y descollantes, colaban una caterva de desconocidos. El proyecto que nos ocupa en nada mejora esta situación, por el contrario, la empeora porque acota las posibilidades del votante de conocer a los “de relleno” al establecer que “c) Para la elección de diputados nacionales se deben incluir el nombre del primer candidato”, los otros serán mencionados en un afiche que estará en el patio de la escuela. A ver, si yo tengo un partido movilizado y militante, y estoy orgulloso de los candidatos que integran mi lista, me aseguraré de llevarte un volante a tu casa para que te enteres de su conformación completa, porque ya no existirá el reparto de boletas. En cambio, si mi lista se parece más a la nómina laboral de Don Vito Corleone que a un coro de ángeles, bastará que yo pasee con un “mascarón de proa” presentable para que (blindaje mediático mediante) el votante ignore durante toda la campaña que con las fojas de los prontuarios del resto podría empapelarse completo le Château de Versailles. A sí, bueno, en una de esas tenés suerte de calzar una cola larga y, con la “netbuk para todos” que te prestó tu hijo en mano, te hacés una investigación relámpago de todos los candidatos que aparecen en los afiches del patio… 

Volviendo al oportunismo. 

En mi post anterior hice relación al “desvastador efecto que produce en las posibilidades de un candidato el leer Clarín y/o La Nación y/o Perfil, o de alisar el culo en un sillón consumiendo TN X 24 hs. X 7 días a la semana, y encima creer en sus análisis o en el poder omnímodo de convicción del que alardean”. Esos mismos efectos pueden verificarse en el caso. 

Cabizbajos por los resultados que se avizoraban en el horizonte, Gil Lavedra & Cia., presentan el proyecto el 20 de mayo pasado. En Junio vino la opereta “Schoklender”, pintada como una patada en el tobillo al núcleo ético K, reforzada más tarde por los reclamos contra Abuelas por las derivaciones del caso “hijos de Ernestina” y la embestida contra Zaffaroni. En Julio sacudón en la CABA por el triunfo de Macri, seguido de Santa Fe, y Córdoba. Los analistoperadores políticos del trío mediático tan mentado destilaban babas especulando con la nacionalización de las derrotas y el efecto demoledor que la sacudida a Madres, a Abuelas y al Juez, producirían en la intención de voto a Cristina. ¿Podemos ser tan malpensados en creer que este panorama es la razón por la cual el ProBolUdO durmió por 3 meses el sueño de los justos en el Congreso? ¿Podemos atrevernos a malicia tal de suponer que el recuento de votos del 14/8 hizo las veces de despertador? ¡SÍ PODEMOS!!! 

Por supuesto que el perfil de serio jurista que atesora Gil Lavedra lo inhibe de ser protagonista de tan burda maniobra de reeditar el proyecto después de tan escandalosa paliza. Por supuesto que los aspirantes (aunque ya sin chances) al Sillón de Nestor deben preservar la poca dignidad que le resta y renunciar al primer papel en el grotesco espectáculo. 

Pero no importa, siempre hay payasos de ocasión dispuestos a hacer las delicias de gorilas grandes y chicos. Basta con que se arme el circo mediático para que salte a la pista la Piba Bullrich para hacer malabares con 3 mancuernas (1 por cada 1% de votos de la CC), denunciando irregularidades en el escrutinio provisorio para justificar el relanzamiento del ProBolUdO. Denuncias de supuestas irregularidades que habilitaron un recuento que obtuvo como resultado que se abulte aún más la cantidad de votos a Cristina y aumente la diferencia con sus rezagados competidores. 

Paralelamente, salen bandadas opositoras a sugerir en conferencias de prensa que no es democrático, ni republicano, que alguien gane por tanta diferencia. 

¿Qué más nos tienen que confesar para que entendamos que el ProBolUdO es un engendro que pretende cambiar las reglas de juego en mitad del partido para favorecer a los que vienen siendo apabullantemente derrotados? 

Porque seamos claros, las P.A.S.O. del 14/8 y las Elecciones Generales del 23/10 no son dos actos electorales distintos, sino dos momentos del mismo proceso comicial, la etapa clasificatoria y el mundial, para ponerlo en términos futboleros, y por lo tanto, lloren, chillen o pataleen, es un despropósito pretender cambiar las reglas en mitad del juego. 

Conclusión: a otro perro con ese güeso. 

Creo que dejé claro mi más profundo rechazo al ProBolUdO, tanto por razones sustanciales (desde lo jurídico, por el desconocimiento al rol que la constitución reconoce a los Partidos Políticos; desde lo político porque desmerece y desconoce la unidad de acción que debe animar a candidatos a legisladores y ejecutivos de un mismo partido, en pos de la sustentabilidad y la direccionalidad de la función de gobierno) como circunstanciales (el esfuerzo oportunista para cambiar en medio de un proceso único las normas de juego). 

Si el planteo es que del sistema de Boleta única podría resultar un aporte a la calidad institucional o a la transparencia de la elección (evitando el robo de boletas, menoscabando la necesidad de fiscalización partidaria, facilitando la acción de “partidos chicos”), podríamos discutirlo como parte de la reforma del sistema político, con la profundidad que ello merece, con el necesario acuerdo de las Provincias a efecto de unificar los sistemas. Y con suficiente tiempo tanto para lograr la difusión y concientización pública del nuevo modelo de participación comicial, como para permitir a los partidos y sus candidatos diseñar las estrategias acordes con el nuevo escenario. 

Pero insisto en la idea que el sistema a debatir debiera parecerse al de boleta única para todos los cargos y de candidatos, al estilo cordobés, para dejar de manifiesto las pertenencias partidarias y las afinidades, y con la inclusión de todos los candidatos de cada categoría, en razón de preservar la transparencia para el elector. Ninguno de estos dos requisitos son reunidos por el ProBolUdO de Gil Lavedra. 

O sea… bueno, SÍ, lo del rollito por ahora, cabe. 


sábado, 27 de agosto de 2011

Yo ya lo sabía de antes!!!!

¡Uds. sigan riéndose nomás de las supuestas pretensiones pitonísico-chamánicas de Rucio! ¡Incrédulos! Sigan ignorando lo que Yespir advirtió,  poniendo en boca del Hamlet Lima Quintana, Hay más cosas en el cielo y en el conurbano, que todas las que pueda soñar tu filosofía, mejor cantate zamba para no morir y dejate de joder".

Ya se los anuncié al final de este post, pero no, claro, los señores tuvieron que reclamar metodología científica y  pedirle encuestas a  la consultora Pregunta Abierta  y a Artemio Lopez para desengañarse. Y encima seguro que les pagaron y todo, y a mi ni siquiera me regalaron el libro de Barragán.

Pronóstico para octubre.

Lo cierto es que el panorama de Alfonsín y Duhalde para octubre se oscurece. Y no cabe echarle la culpa sólo al existismo argentino, ni a las operetas de Clarín. De ninguna manera. Los tipos se esfuerzan con méritos propios también. Ya el domingo a la noche, Duhalde no pudo escapar a la tentación de reafirmar su anacronismo con un “flamean banderas de organizaciones que son y han sido subversivas” y de sugerir la instalación de un escenario de violencia y “susto” más apropiado a su perfil. Alfonsín tampoco pareció percatarse de la vaca en el bidet, arrancó subestimando la trascendencia de las P.A.S.O. calificándolas de “encuesta” y, lejos de autocriticarse por su armado “contra natura” o por la pobreza conceptual de su campaña, apenas llegó a circunscribir su crisis a “defectos de comunicación“ . Por supuesto que poner jóvenes a vomitar mientras ven 678 puede ser caracterizado como un problema de comunicación, pero además refleja una subestimación al electorado y una actitud reactiva en lugar de la propositiva que debería animar a un candidato a Presidente.

Para colmo, ambos compartieron un latiguillo fatídico: el panegírico del modelo chileno, justo en épocas donde su barniz de exitosa modernidad se va descascarando y pone al desnudo toda la impudicia de desigualdades del régimen neoliberal a ultranza, heredado de Pinochet y conservado en su pureza libremercadista durante la democracia.



Sobre lo llovido, mojado: el empate técnico entre Ricardito y el Cabezón (más la inmensa ventaja oficialista), desarticuló la posibilidad de cualquier maniobra que pretendiera confrontar a Cristina con un solo candidato opositor consolidado y con expectativas ciertas de esquivar un nuevo papelón.

Queda demostrado en esta campaña el devastador efecto que produce en las posibilidades de un candidato el leer Clarín y/o La Nación y/o Perfil, o de alisar su culo en un sillón consumiendo TN X 24 hs x 7 días a la semana. Y encima, creer en sus análisis o en el poder omnímodo de convicción del que alardean. Se me ocurre una sola explicación a la actitud refractaria de millones de electores frente al discurso mediático, que no pasa por la masividad, sino por la individualidad. Una aplicación práctica de aquello de “se puede mentir a algunos todo el tiempo o a todos por un tiempo, pero no se puede mentir a todos todo el tiempo”. A ver: en cadena nacional privada se invisibiliza la acción de gobierno, se pone en dudas la veracidad de cualquier número favorable a la gestión, se desconocen los logros concretos, se tergiversa la información sobre los efectos de las políticas sociales. TODOS, directa o indirectamente, consumimos esta verdura: no es cierto que se hayan construido más de 1000 escuelas nuevas, no son ciertos los miles de kilómetros de gasoducto, no son reales los nuevos puestos de trabajo, ni la reactivación económica, ni los planes sociales de viviendas. Todo y cualquier cosa puede ser tapada para el 99,99% de la población, menos para el beneficiario de alguna concreción, para la familia del gurí que va a la escuela nueva, para el que prende el calefactor en su casa a precio de bicoca, para el que después de más de 10 años consiguió empleo o se jubiló, para el que por fin accedió a su vivienda con agua, cloaca y luz. Para esos Cristina es una realidad palpable que no puede ser desmoronada por ningún operativo de prensa. Y la puta que parece que son muchos los que lograron alguna mejora en su cotidianeidad…

Ese microanálisis parece ser ajeno a los equipos de los dos (¿ex?) principales hombres en pugna, el macro que dibujan los multimedios abarca hasta su último resquicio neuronal. Y por ahí transitan, ávidos del voto de un universo cada vez más pequeño de disconformes.



La lógica indicaría que es hora de contradecir a sus patrocinantes, readquirir desde la política un nuevo compromiso con la ciudadanía y, si de asumir errores se trata, reconocer que con este gobierno las cosas no le van tan mal a la ciudadanía. En definitiva, tomar lo hecho como un avance e ir por más. Pero en cambio, desde Clarín nos anuncian que todo se trata de una cuestión comunicacional, y que van a fortalecer la fiscalización del comicio y fortalecerán sus críticas al gobierno. Y ya que estamos, trataremos de cambiar las reglas del juego electoral metiendo a marcha forzada la boleta única, apuntalándola con un escandalete mediático, denunciando a presidentes de mesa y horrorizándose por la confección de algún telegrama. Creo que así poco ayudan a su nueva táctica de ir por los escaños del Congreso “para controlar” (JI! Hipócritas…) a quien ya reconocen como número puesto para la reelección.

Las dos campañas menos agresivas (creo que las más inteligentes) han sido la de Rodriguez Saa y la de Binner (casualmente, los más alejados de Clarín hasta entonces). La noche del 14/8 ambos perfilaron un discurso de tono consonante, más amigable, no se empecinaron en la crítica, se consustanciaron con el resultado y subrayaron las propuestas, a su entender, superadoras de nuestro modelo.

Sinceramente, les deseo suerte, por más que la historia reciente de los actores haga que no les crea nada. Un resultado electoral que ponga a estos dos candidatos  por encima de los Mariscales del Retorno al Pasado, puede llegar a ser un mensaje significativo sobre el modo viable de hacer oposición, y, quien te dice, los convenza de que la construcción y conducción política es tarea de los políticos y no de los dueños de los diarios. Sino, preguntenle a la Goorda como le fue.

Lilita se medicó el martes y parecía que logró poner
sus patitos en fila. Ya se le va a salir uno. Posta.



lunes, 22 de agosto de 2011

P.A.S.O. en Colón. Como perfila Octubre.

El título más prominente del periódico local “El Entre Ríos”, respecto a las PASO del domingo pasado, obviamente no fue la paliza que propinó Cristina en todo el territorio Nacional, ni siquiera que Urribarri arrimó peligrosamente al 50% y que ganó en todos los departamentos, o que Marcos Luciani proyecta su candidatura sobre una inquietante cantidad de votos.


NO. El título más importante estuvo dedicado a la “sorpresa” que provocaron los candidatos a intendentes radicales, quienes entre ambos consiguieron 1/3 de los votantes en la ciudad, el 230% de lo que obtuvo el precandidato ganador, Ramiro Favre, como candidato a intendente en las elecciones municipales hace 4 años.

Precandidatos Radicales

Favre-Nuñez (+ algunos FPV)
4.270
Irigoy-Aguilar (+ Adami troupe)
860
Total
5.130

Está claro que, por escaso margen, la alianza liderada por el radicalismo se impuso aquí en las legislativas del 2009, pero ¿Esto demuestra que la UCR colonense desplegó una inusitada labor política durante esto 4 años y que su candidato adquirió, merced a un descollante protagonismo, una estatura descomunal? NAAAHHHH!

Veamos que dicen los números en Colón para la alianza pan-radical-progresistoide (UCR+PS+GEN+CC-ARI):


p. Presidentes
p.Dip.Nac.
Alfonsín-G. Fraga
2.979
2.973
Binner-Morandini
1.420
677(PS) + 537 (GEN)
Carrió-Perez
484
453
Total acumulado
4.883
4.640

Es decir, podríamos colegir que se trata de un mero efecto arrastre, un voto orgánico al APCyS. Los 243 votos de diferencia entre los Presidentes y los Diputados, se explica por el lado que en esta última categoría hubo 704 votos en blanco más, resultando los diputados de Binner las principales víctimas (-206). Ahí es donde empieza a diluirse la sencilla hipótesis del voto orgánico, sumadas, ambas fórmulas radicales para la intendencia obtienen bastante votos más que la acumulativa presidencial. Pero: ¡calma radicales! Uds. bien saben que de un sector peronista una de las listas recibió todo tipo de ayuda, incluso de votos, y yo se que, quizás como reflejo, del otro sector del peronismo varios completaron la boleta del FPV con el otro de sus intendentes y concejales. ¿Cuántos son los votos prestados de cada lado? Fabre reconoce al menos 7 puntos... Miren que en octubre se devuelven, eh?.

Colón: como son los pocos votos locos. ¿Por?
El corte de boletas es la peor pesadilla de los fiscales y de los presidentes de mesa, a no dudarlo. Pero más allá de la dificultad que entrañan en el recuento, en pueblos como éste suelen ser demostrativos, más que de un comportamiento esquizoide de parte de la sociedad (que también los hay), de jugadas políticas de algún dirigente, de pases de facturas y de acuerdos parciales entre sectores políticos.
Veamos la magnitud del corte en Colón, tomando como referencia las candidaturas a presidentes.

Las candidaturas amontonadas como “otros”, sólo presentaron candidato a Presidente (Altamira: 258) o se fueron al descenso directo (Argumedo, Bonacci y Pastore, en total para presidente 300, 113 a Diputados del P.Sur). Para las categorías provinciales y municipal, como la elección no es obligatoria, no se computan votos blancos. Los votos nulos, en estos casos, fueron casi inexistentes.

Presidentes
Dip.Nac.
Gobernador
Dip. Prov.
Sen.Prov.
Cristina        6.461
      - 260
L2:  6.737
+ 814
L2:  6.213
+ 232
L2:  6.207
+ 53
L211: 538
L211: 480
L211: 307
Ricardito      2.979
           -6



El Cabezón 1.847
       -224



Hermes       1.420
       -206



El Alberto       878
         -34



La Gooorda    484
-31



Otros              558
-445



B/N                 812
+1206



Total votos 15.439
15.439
-8.164
-8.746
-8.925

Podemos ver, en general una fuga de votos hacia el voto en blanco, en la categoría Diputados Nacionales. Los más perjudicados resultaron los candidatos del FPV, y los seguidores de Duhalde y Binner. Podríamos atribuir la causa de este comportamiento al desconocimiento de los candidatos, salvo, parcialmente, en el caso de Duhalde.

El Bañero Cabezón fue apoyado localmente por (al menos) 3 facciones: el Pro, el Gremio Gastronómico y Rubén Adami y su troupe. Según cuentan las malas lenguas, su candidato a Diputado Nacional, Héctor Strassera, no habría “arreglado cuentas” con los gastronómicos ni con Adami, producto de lo cual (esto me consta), a media mañana desaparecieron las Boletas Duhalde-Strassera de los cuartos oscuros, siendo reemplazadas por la de Duhalde, cortada y solito. El bochinche provocado por los fiscales del Pro hizo que en un par de horas se normalizara la situación, y que saliera por la culata la jugada de demostrar el poderío del adamismo con la diferencia de votos entre Duhalde y Strassera.

Podemos ver que Urribarri consigue 276 votos más que Cristina (casi el 1,80%), como ya dije en el post anterior, existen ciertos sectores que no estiman de igual manera a la Presidenta y al Gobernador, lo cual se manifestó a través de un voto cruzado: Alfonsín Presidente-sus Diputados Nacionales-Urribarri, con notable mengua para sus Diputados y Senador provinciales.

El sector peornista-duhaldista local, como ya vimos, también movió sus fichas, lo que se percibió en la jornada (aparecieron como fiscales incondicionales adamistas como el Cjal. Bonvín acompañado por su mamá y el “hincha caracterizado” Tano Martinez) y se apreció en el escrutinio (buena cantidad de sobres en los que se combinaban Duhalde, la lista 211 de la interna del FPV y la lista perdedora de la interna radical municipal). Noten también otra cosa: los casi 180 votos menos que recibe el Senador de la L211 respecto a sus Dip.Prov. Dado que Rubén Adami competirá por el cargo de Senador Provincial en octubre por la lista de Jorge Busti, es claro que si bien hubiera querido perjudicar a Oscar Arlettaz, no podía agigantar la figura de otro candidato local (Maya) que pudiera sumar al primero.

A pesar de su evidente intento de tener presencia en las P.A.S.O., aún cuando no compitiera personalmente ni lo hiciera su candidato a Intendente Mariano Rebord, el potencial electoral que podría haberse adjudicado  Adami, en el mejor de los casos, quedó desdibujado. En el peor de los casos (para él), fue paupérrimo y poco promisorio para sus aspiraciones. Pareciera exagerado atribuirle la totalidad de los votos que obtuvo Catato Irigoy en la interna Radical, a los 1847 de Duhalde los comparte con el Pro, y peor aún resultaría especular sobre la incidencia que pudo tener sobre los escasos 538 votos que obtuvo Gonzalez (L.211) en la interna del FPV. Todo indicaría que Adami, en su ciudad de origen, cuenta con un piso demasiado bajo (casi de sótano) para su ambición de ser Senador por el Departamento Colón.

La conclusión es extensible a su prohijado Mariano Rebord (secundado en la lista por su primo como vice y acompañado por su cuñada como Concejal): aún cuando en una operación en extremo optimista transfiriéramos a su candidatura la totalidad de los votos obtenidos por Duhalde, Rodriguez Saa, Altamira y del resto de los partidos que no cuentan con candidatos locales, más los blancos y los nulos, aún deberíamos agregarle los de Catato Irigoy que no se superpusieron con el voto a Duhalde para que logre alcanzar la línea probable del candidato a intendente del radicalismo, y disputar un honroso segundo puesto.

Y no me olvido de los Vecinalistas (UVeCo y MPU). Ninguna de las dos vertientes existentes en Colón puede ser caracterizada por coptar voluntades kirchneristas precisamente, por lo que aparecen como competidores en la conquista de voluntades que anidan en el mismo espectro al que apuntan Rebord o Favre.

Entonces ¿Marcos está feliz?
Aunque no compitió directamente en las P.A.S.O., indudablemente las expectativas del candidato a intendente por el FPV se han visto ampliamente favorecidas con el resultado del 14/8. El universo de electores razonablemente más proclive a acompañarlo, revela un número fuera del alcance de cualquiera de sus competidores.

Pero, por supuesto, poco tienen que ver las matemáticas con la política. Si bien los números alientan perspectivas optimistas, Marcos Luciani deberá demostrar durante dos meses que ofrece semejantes cualidades y parecidas ideas a la de aquellos  con los que comparte un Proyecto Nacional y Provincial, y que ya han merecido la explícita confianza de los colonenses manifiesta en las urnas. De él mismo dependerá que los 6200 votos que obtuvieron los Diputados Nacionales (los menos votados en Colón del FPV) o los 6700 de Urribarri (el más votado), se constituyan en su piso o en su techo.

Personalmente, creo que tiene con qué. Pero eso será materia de otro post.


Probable proyección de votos a la intendencia.
Ramiro Favre (UCR) 30%, Marcos Luciani (FPV) 45%.
El 25% restante se disputaría entre Rebord (FEF),
Ducret 
(PRO) y Gonzalez (MPU)