martes, 4 de octubre de 2011

El Pollo y los buitres.

Estoy de acuerdo cuando la CGT dice en su comunicado que “llama la atención la facilidad con que la justicia actúa sobre los dirigentes gremiales cualquiera sea su trayectoria o ideología política en un país donde los narcos, los apropiadores de bebés, los abusadores de menores, los que saquearon la Argentina, los que hacen espionaje a los vecinos, los traficantes de armas, los corruptos, los que defraudan al Estado y al pueblo parecen tener –aun los condenados– otra consideración y otra suerte.”


En la Argentina no suele verse Jueces del fuero Laboral compartiendo el asado del 1º de Mayo con los trabajadores. Pero sí es habitual ver Jueces de cualquier fuero asistiendo a reuniones empresariales, e incluso se los ve a menudo departiendo en amable cena con importantes hombres de negocios de su jurisdicción, y a nadie se le mueve un pelo por eso. Eso sí, ¡guay de que un juez suba al escenario de un cantante cuartetero y popular!



Tiene razón la CGT en sostener que los jueces tienen actitudes clasistas y prejuiciosas, y lo son al punto de que lo hemos naturalizado socialmente. Pero en lo que no tienen razón es en el sesgo corporativo que dan a su queja. Lo vuelvo a releer y me da la impresión de un reclamo dirigido a compartir los privilegios de los ricos y poderosos, cuando, al menos para mí, la lucha debería estar planteada en erradicar definitivamente los privilegios (no en compartirlos), y hacer prevalecer el principio de igualdad de tratamiento ante la ley. 


De más está decir que no comparto el ideario político del Pollo Sobrero, pero no me cae bien verlo preso. Más allá de eso, me parece que no nos podemos perder en una maraña de especulaciones infundadas sobre una intencionalidad aviesa detrás de su detención (como no las ensayé cuando lo engayolaron a Pedraza o a Zanola, ni cuando lo imputaron a Venegas). Me suenan patéticos los balbuceos de su abogado , ridículas las imputaciones del PTS, afines y oportunistas políticos varios, y más lamentables aún los comentarios del trosko-trollerío para quien la revolución pasa por repetir boludeces del “Manual del Izquierdista Perseguido” en los blogs del palo.



Flaco favor le están haciendo al Pollo. Lo están usando de excusa para la victimización del sector, para cohesionar sus alicaídas líneas y juntar algún voto más el 23/10. Cuando sobre el pellejo de Sobrero cae un manojo de imputaciones penales y de las graves (asociación ilícita, estrago al transporte público, extorsión) se sumergen en un supuesto entramado de pases de boletas hacia Zannón, compensaciones a Pedraza y no se que cosa relacionada al próximo aniversario del asesinato de Ferreira, sabiendo perfectamente bien que cualquier pataleo de esa especie en nada ayudará al referente gremial en los estrados judiciales. Si el Juez es un tipo serio y tiene pruebas, no cambiará el rumbo de la investigación por una movilización y 4 declaraciones políticas. Si el Juez es un chanta que busca prensa, o algún tipo de rédito o descrédito para quien sea, más se arrimará al estrellato ensañándose para demostrar que es bien macho y no cede a presiones.


El trotskismo argentino ha desarrollado una campaña política de fuerte contenido reformista que en nada lo diferencia de cualquier partido socialdemócrata opositor europeo. Ha abandonado banderas identitarias en pos de la captura del electorado, ha renunciado a la revolución permanente en búsqueda del milagro, se ha aliado a los sectores de poder permanente más retrógrados de la Argentina en su afán de subrayar su rol opositor. La detención de Sobrero lo anima ahora a la recuperación de clichés extraviados por la propia dinámica de no represión del kirchnerismo: encontraron la oportunidad de golpearse elpecho y clamar que son perseguidos políticos. Lástima que ese sendero ya ha sido gastado por las corporaciones mediáticas, los periodistas pseudo-independientes, los militares genocidas y los agrogarcas.

Cualquier análisis serio de la realidad política argentina arrastra irremediablemente a la conclusión de que cualquier “ruido”, cualquier circunstancia que afecte la “normalidad”, no resulta funcional a los intereses electorales oficialistas a menos de un mes de las elecciones consagratorias. ¿Puede haber alguien tan ingenuo que crea que la detención de Sobrero es una jugada del Gobierno? ¿Puede ser alguien tan obtuso en pensar que algo que puede leerse con facilidad como un ataque al gremialismo o a un partido que ningún riesgo entraña al objetivo reeleccionista, pueda salir de un cerebro que anida en la Casa Rosada?

Uno se acostumbra a que desde el trotskismo nos acusen de reformistas (aún cuando los muy cínicos levantan banderas reformistas), que nos digan que somos antirevolucionarios (cuando en su historia como ideología jamás hicieron una revolución), que nos endilguen el mote de pro-capitalistas (cuando en el momento que este Estado intentó apropiarse de la renta agropecuaria extraordinaria corrieron a alinearse con la oligarquía). Pero que nos traten de pelotudos… es imperdonable. 



P.D.: desde la más profunda irracionalidad sentimental, quiero creer que el Pollo Sobrero es inocente, que es ajeno a la práctica de destruir herramientas de trabajo como procedimiento de lucha sindical, que no se caga en lo millones que usan el tren para llegar a su lugar de trabajo. Ojalá así sea, que salga limpito de esta, y quede claro que el Juez (y yo mismo) nos equivocamos.



12 comentarios:

Daniel dijo...

¿Puede haber alguien tan ingenuo que crea que la detención de Sobrero es una jugada del Gobierno?

Respuesta: TODOS los troscos TODOS.
Ahora, es ingenuidad lo de ellos?

Bueno, en cuanto a las alianzas, en Venezuela fueron de cabeza a integrar la mesa opositora (salvo una fracción) con lo peor de la derecha sede en Miami.

Rucio dijo...

No Daniel, no es ingenuidad, lo del troskerío se llama de otra manera.

ram dijo...

Daniel llama a esos chicos "de la cuarta", y no, son "de la quinta", de la quinta columna con la que alardeaba franco, el generalísimo.

profquesada dijo...

De acuerdo en todo, menos en escracharlo a Lorenzetti porque participa en un panel de la SIP, es el Presidente de la Corte Suprema, es un representante del Estado, cómo no va a ir si lo invitan. Habrá que ver que dijo, si es que habló. Últimamente habla bastante y no todo lo que dice es seguramente al gusto de Clarín o La Nación. Pronto intentarán organizarle alguna operación como a Zafaroni. De momento los nietos de los represores trataron de reventarle el acto en la facultad de derecho. Que intenta vender su libro?, quizás, pero no olvidemos lo que el libro dice. el punto de vista sobre los juicios a los represores que despliega.

Ricardo dijo...

Gran post, Rucio. En poco tiempo tu blog se convirtió en una referencia para mí (y para muchos más, espero).

Pibe Peronista dijo...

Muy bueno Rucio! Un análisis de cirujano, como nos tiene acostumbrados.

abrazo!

Rucio dijo...

Profe, no se la conseguí entera: http://edant.clarin.com/diario/2009/11/10/elpais/p-02037638.htm, estamos hablando en la SIP en plena época del debate de la ley de medios. Interprételo conforme al auditorio.
También tengo esta otra http://www.notiexpress.com.ar/index.cgi?mod=contentFront&_wf=true&accion=get&comando=article&articleId=104487, donde dice que los jueces no deben dejarse presionar por los sindicatos, nunca le escuché frase similar respecto a las patronales.
De todos modos, la foto no tenía como objeto el escrache, sino ilustrar mi convicción sobre el sesgo clasisto de los jueces (de lo que estoy plenamente convencido).
Abrazos Profe.

Gracias Ricardo, un verdadero orgullo.

Capitán Yáñez dijo...

No sé si es un tema prioritario el de "la Justicia", en mi opinión, mientras haya en este ispa un solo pibe desnutrido y uno solo desescolarizado creo que el asunto puede esperar. En algún momento, eso si, habrá que arrojar a los jueces a los leones y que los "republicanos" que supimos conseguir puteen cuanto quieran.
El juez de éste caso en particular, debiera ser de los primeros en ser arrojados a las fauces de los bravos felinos. Armó un descomunal operativo un viernes para dejar adentro un fin de semana entero a un tipo porque un lumpen le dijo a un policía que... Y después dice que si pero que no, que no parecía ser para tanto y pregunta la hora, porque al parecer no sabía ni en que hora vivía (esto fue hoy al mediodía). Un verdadero mamarracho del que es muy difícil analizar para qué se hizo lo que se hizo. Y para qué salió el compañero Jefe de Gabinete a decir lo que dijo, enchastrándose en el lodo. Un papelón.
En cuanto a los troscos, no gaste pólvora en chimango, Rucio, no vale la pena.

Rucio dijo...

Pibe, no mencione la palabra cirujano en un post relacionado a troskos que se me ocurren cosas perversas.
Capitán, su intento de coartar mi libertad de expresión está condenado al fracaso. Desde que fueron declarados especie protegida (los trsocos no los chimangos) en la convención de Nairobi sobre biodiversidad, y ya no se les puede tirar con cañitas voladoras, es lo único que nos queda para descontracturarnos.

Capitán Yáñez dijo...

Estimado Rucio: ayer justo después de leer su blog y comentar me encontré con las exigencias de Cristian Castillo (renuncia de Aníbal, Comisión Investigadora, etc.). En principio se me ocurrió pensar en otro delirio rayano en lo sobrehumano... pero después empezó a carcomerme una duda terrible: ¿no serán éstos tipos verdaderas mentes superiores y los hemos estado subestimando?. ¡Ayúdeme, por favor, por culpa de esa duda no he podido pegar un ojo en toda la noche!

Rucio dijo...

¿Ve que es como yo le digo? No hay que confundir, la capacidad de raciocinio de un trosko supera fácilmente la de un chimango promedio.

roberto dijo...

Cuantas dudas tengo de los dirigentes sindicales, todos corren a defenderse que buenitos son, en realidad lo que buscan es salvarse ellos y si sobra algo es para los laburantes, claro que nunca faltan soretes oportunistas que enarvolan sus banderas partidistas apoyados por el nuevo izquierdista Magnetto.